El cabello es un reflejo de ti. Habla de tu personalidad, pero como si lo hiciera a través de un altavoz. Ya no solo es que revele datos sobre ti, sino de tu estado de ánimo en ese momento. ¿Te has fijado alguna vez cómo cambia tu cabello en épocas de estrés? Se te cae más, se te pone más reseco, salen escamaciones en el cuero cabelludo…
En el género femenino, según el corte que lleves en ese momento, también arroja datos sobre ti. Pero en esta ocasión, queremos hacer hincapié en los hombres, quienes cada vez se preocupan más por el estado de su cabello y por arreglarlo.
Y claro, al peinarlo, hace falta fijarlo para que dure el máximo de tiempo posible en buena apariencia. Veamos con qué opciones contamos.
Tipos de fijación para el pelo
El tipo de fijador capilar que tiene que usar un hombre depende de su tipo de pelo porque no todos los productos valen para todos los cabellos. Aun así puedes encontrar:
- Gel o gomina fijadora. Es uno de los más conocidos porque aguanta horas y es idóneo sobre todo para cabellos más cortos.
- Cera. Está pensado para cabellos más largos porque la idea es moldearlo, para después fijar y dar brillo. Ofrece un acabado muy natural, evitando el apelmazamiento del cabello.
- Laca. Otro clásico que da forma, volumen y va en contra de la ley de la gravedad
- Espuma. Ideal para pelos rizados ya que crea unas bonitas curvas a tus rizos bajo un efecto mojado. Tiene el mismo resultado en el pelo corto que en el pelo largo.
- Polvos texturizantes. Se está convirtiendo en un éxito entre aquellos hombres que les gusta un estilo más despeinado y natural.
Dentro de cada producto, vas a encontrar gamas para diferentes tipos de cabellos (grasos, secos…). Solo tienes que probar y quedarte con el que te ves mejor.