Ir a la peluquería es más que arreglarte el cabello para estar guapo. Implica bienestar y autocuidado. El cabello es un medio de expresión que puede dar pistas de tu estado de salud y bienestar emocional, además de ser muy importante para proteger el cuero cabelludo de las inclemencias de los climas y cambios estacionales.
Por eso, es muy importante el tipo de productos que usas en el cuidado diario ya que hay que tener en cuenta una serie de factores como, por ejemplo, que no pierda la lubricación natural que tiene. Así que es bueno que conozcas el tipo de champú y acondicionador que le viene mejor a tu cabello.
Tipos de champú
- Champú para cabello graso. Limpia e hidrata el cuero cabelludo profundamente, eliminando el exceso de sebo.
- Champú para cabello seco. Contiene ingredientes que absorben la grasa y refresca el cabello.
- Champú anticaspa. Ayuda a aliviar la picazón por la descamación del cuero cabelludo y la irritación a causa de la caspa.
- Champú neutro. Es un champú saludable que busca equilibrar el PH de la piel.
- Champú hidratante.
- Champú para cabello liso.
- Champú para cabello rizado.
- Champú para el cabello dañado. Repara el cabello dañado. Será mucho más efectivo, si lo acompañas con otros productos como los acondicionadores para este tipo de cabello. Veamos cuántos más hay.
Tipos de acondicionadores
- Acondicionador engrosador. Sirve para aumentar el grosor del cabello, dándole más brillo y volumen. También lo fortalece y protege la fibra capilar.
- Acondicionador profundo. No es un acondicionador como los que conoces ya que este modelo se encarga de fortalecer, hidratar y nutrir profundamente el cabello, aportándole salud.
- Acondicionador hidratante. Ayuda a hidratar y dar brillo al cabello dañado y puntas abiertas.
- Acondicionador para cabellos rizados. Cumple la misma función que el anterior, solo que añade definición a tus rizos.